PAPELES DE RECIENVENIDO
SALVEDAD
Ni ésta, pasajera, ni una eterna obra literaria, ni un autor común ni uno privilegiado de
inmortalidad, pueden atribuirse audiencia en la tensión noble de esta hora mayor de la
humanidad. Con escalofrío tendría que mirar un autor consciente el desaire del andar
aparecido de un libro suyo por entre la desatención suprema de una humanidad en única
ennoblecida contención.
De una edición de solo doscientos ejemplares ésta es esencialmente una segunda, después de
casi quince años de aquélla y de prometida ésta. Para que su manuscrito yacente en un
armario no moleste mis pocas energías mentales, que dedico a la pulsación actual de lo
humano, lo saco de cerca de mí; todo nos gasta a los ancianos.
Creo que salvo pocos renglones felices no aporto novedad en la humorística que había
estudiado tanto. Que el lector, condolido, a ml personalmente me perdone lo que, juagante,
no perdonará al libro.
Si muchos miedos, y una constante imposición del Misterio, hacen humorista, nadie escribirá
más alegremente, hará más optimistas que yo.
M. F.
I. PAPELES DE RECIENVENIDO
El Recienvenido (Fragmento) ¡Fue tan fortísimo el golpe que no hay memoria en la
localidad de que en los últimos cuarenta años se haya registrado temperatura tan elevada
en la región golpeada! (Otra cosa que los más ancianos del país no recuerdan es que yo
haya sido visto con dinero algún día en ese mismo intervalo; pero eso lo diré más
adelante, cuando otro hecho excepcional requiera el énfasis de una referencia a cosa no
acaecida en cuarenta años. Esos intervalos de 40 años tan cómodos se encuentran en
cualquier localidad, a menos que hayan sido recientemente atropellados por una
locomotora y que todavía el ayuntamiento local no haya iniciado su reconstrucción. Es
muy conveniente que una vez registrado un terremoto y puestos hacia afuera sus
bolsillos, se le coloque en el departamento contiguo al de intervalos de 40 años y al de
las temperaturas más revisadas y registradas, y que estos tres locales estén siempre a la
izquierda y a breve distancia de la Estación de tren, que es el lugar donde se elevan las
tarifas, con amplia facilidad para descan ilamientos a la derecha. Un poco más allá... todo
viajero que no se haya quedado en su casa debe saber distinguir el lugar denominado unpoco-
más-allá, sin lo cual andaría tan extraviado como si no hubiera leído nunca-lo que
no puedo creer- mi discreta obra "La Guía del Cojo en el Camino Recto de la Vida".
Soy de un temperamento tan instructivo que no puedo dejar de informaros que todos los
pueblos existentes -los inexistentes son malsanos- deben tener una estatua del inventor
de los lados derecho e izquierdo y los de revés y anverso, distinción ésta que sólo los
agujeros escurren. No me pregunten ahora el por qué los comisarios más abusivos
siempre se abstuvieron de llevar presa a ninguna estatua, que viven en las plazas como
los vagabundos, ostentando el mal ejemplo de su holgazanería.
No hay comentarios:
Publicar un comentario