¡¡¡GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE!!!

¡¡¡GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE!!!
AUTORA-AmPaRo EsTeVeZ SaViZa
Powered By Blogger

visitas del día

59,919

Vistas de página en total

59,919

Amparo Estévez Saviza

Mi foto
Considero que un espacio interactivo debe servir para comunicar, compartir y pasar momentos agradables que nos ayuden a pensar la vida como bella y en este caso específico a conocer a los escritores y poetas que en todo momento transbordan vidas diversas arte y sueños a nuestro corazón...

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Poemas De Un Angel Sin Alas





Ante mí un papel en blanco…
no sé ni cómo empezar,
tu correo en el portátil…
no me decido a enviar,
tu contacto en mi móvil…
y no me atrevo a llamar.

Ayer pasé ante tu puerta
y no intenté ni timbrar.
La timidez me atormenta
tengo miedo a fracasar.
El temor es aún más fuerte
que mi anhelo por amar.

Enloquezco si lo pienso
no quiero ni imaginar
que por declarar mi amor
lo pudiera estropear
me apartaras de tu lado
no te lograra alcanzar.
5-11-2013

Diego López - He avizorado




Diego Lopez
--Mis flores

He avizorado



la puerta del alma que más anhelaba
y me posé en el umbral de los sentires que besan
para pronunciar el nombre que cincela el corazón.

He avizorado los mares que navegan tus miradas
y me posé en sus riberas desnudo de quebrantos
para ofrendarte mi vida como pétalo que renace.

Pues anhelo sumergirme… en el oleaje de tu amor

Diego López

de: Alondra VALEY - En el sur





En el sur
Comienzan los días tibios. Las palomas de mi patio hacen pareja; los gorriones pelean por las migas que les tiro. El tero, guardián de mi casa me saluda con su acostumbrado cabeceo. Los damascos caen por su propio peso. Hay tantas plantas que casi no se ve el cielo, pero su azul se hace notar a través de las hojas. El sol, algo molesto ya, sabe buscar sus rincones. Una tibia brisa de atardecer hace retomar los abrigos. Los pájaros se preparan para retornar a sus nidos. El zorzal canta a las siete de la tarde y se levanta a las cuatro de la madrugada, aún casi de noche todavía. La mesa de piedra testigo de tantos almuerzos y cenas, continúa fría como escarcha, a la espera del mantel de los domingos.
Soy una más entre los presentes; la tarde, los gatos del vecino que se pasean por los muros. La madreselva que protesta por que tiene que dejarles parte de la pared para
sus libres albedríos y sus amantes noches de aullidos gozosos.
El perro del departamento de al lado que grita como loco de alegría cuando llega su amo. Puertas que se abren y cierran.
No estoy dispuesta a vivir esos momentos bellos sin una compañía. Me preparo mate
bien Argentino, pero con azúcar. Eso sí, con termo y agua del dispenser. Claro, son los nuevos tiempos. Tiempos en donde muy pocas personas pueden disfrutar de un patio como el mío y eso sí debo agradecer a Dios…
El corazón a veces se pone caprichoso y quiere más. ¿Qué más? ALGUIEN CON QUIEN HABLAR…
de: Alondra VALEY

de: Alondra VALEY - No siempre o casi nunca







No siempre o casi nunca

He recibido regalos de esos que esperas ansiosamente. Inclusive cuando me regalaron la única muñeca que tuve, hubo que esperarla. De ahí en más todo me lo prodigué con trabajo y esfuerzo. Es tan así que estoy absolutamente convencida que nunca voy a recibir nada Es más, cuando se perfila algo que me parece como caído del cielo, me digo íntimamente, “no es para mí”. Siempre supuse que lo bueno me venía si iba a buscarlo. Nunca me sorprendí y agradecí lo que venía con todo el amor posible, pero
en una batalla conmigo, porque no sabía decir gracias ante una caja de bombones. No quiero decir con esto que no la valorara. Lo que quiero decir es que hay regalos que tienen que ver con los sentimientos Yo valoro esos regalos, los que te suceden sin esperarlos. Que anhelas pero nunca expresas que los deseas. Y que de antemano ya los das como imposibles. Como la cartita arrugada de algún alumno, nada más valioso. El dibujito de un nieto. La mano apretada de un saludo. Salir a comprarte un remedio que te hace falta a las dos de la mañana. Y te pasa. Son maravillosos regalos de la vida. Pero a veces esperas algo grande, por lo imposible y por lo que representa.
Y de repente tocan a tu puerta y te entregan un envoltorio valioso lleno de significado porque conoces a quién lo envía…
.Te comes la tarjeta a besos y todos te dicen -¡Ábrelo! Y tú piensas nada más que en la persona que te lo regaló- Y pasa lo que crees jamás pasará, en el reverso de la tarjeta dice “Adiós, hasta siempre” sueltas el regalo y éste se hace trizas sobre el suelo…
No importa lo que había adentro. Importa que “Tampoco era para ti”
de: Alondra VALEY