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Amparo Estévez Saviza

- Considero que un espacio interactivo debe servir para comunicar, compartir y pasar momentos agradables que nos ayuden a pensar la vida como bella y en este caso específico a conocer a los escritores y poetas que en todo momento transbordan vidas diversas arte y sueños a nuestro corazón...
jueves, 17 de abril de 2014
Gabriel García Márquez: Discurso por el recibimiento del Premio Nobel

A Cristo crucificado (doble vídeo) - No me mueve, mi Dios, para quererte...

Jose Francisco Zarate - Ayer me puse a pensar...
Jose Francisco Zarate
17 h ·
Ayer me puse a pensar
¿qué felicidad puedo darte si vienes?
El mantenerme indiferente al mundo
Me hizo un ser triste y ermitaño
Tratando de escuchar un mensaje del Señor,
apuñalado por el pecado,
que nunca me encontrarás por los caminos tuyos
de peregrinajes y de fiestas
de luces, y de magia
de besos y de ternuras
porque ya me volví un ser triste y ermitaño
que no se cansa de buscar lo que tal vez no existe.
Es que ayer me puse a pensar
que no coordinan nuestros pasos
lo vi en tus ojos,
lo sentí en tu aire,
sentí que no sientes nada,
y ya no hay tiempo
o abandono parte de mi
y la lleno con la tuya
o abandonas parte de lo tuyo
y la llenas con lo mío
o arriesguemos, apostemos todo,
porque al fin y al cabo, eso es el amor
sin embargo no dejo de pensar
¿Qué felicidad puedo darte si vienes?
Porque ya me volví un ser triste y ermitaño
apuñalado por el pecado.
Y entonces comprendo a Dios
y comprendo porque estás lejos
y entonces comprendo al amor
aunque siempre salga perdiendo.

EN TU OMBLIGO VIVO YO - RAÚL ROVIRA
17 de abril/2014-Raul Rovira
Como quisiera subirte la blusa
e hilar detalles hermosos en tu ombligo;
seguir con las yemas de mis dedos
el nacimiento de las auroras boreales,
inventarme el crepúsculo de mis días,
saborear el infierno dulce de granadas
y manzanas de tu piel desnuda;
también, alejar a las deidades
de ese volcán primigenio de tu ombligo;
pero principalmente, pelear contra todos,
porque en ese lugar
donde la vida retoma su cadencia,
allí en tu ombligo,
vivo yo.

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