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Amparo Estévez Saviza

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Considero que un espacio interactivo debe servir para comunicar, compartir y pasar momentos agradables que nos ayuden a pensar la vida como bella y en este caso específico a conocer a los escritores y poetas que en todo momento transbordan vidas diversas arte y sueños a nuestro corazón...

lunes, 17 de octubre de 2016

LIBRE TE QUIERO





LIBRE TE QUIERO
Publicado el 6 diciembre, 2014 por amparorules
Libre te quiero
como arroyo que brinca
de peña en peña,
pero no mío.
Grande te quiero
como monte preñado
de primavera,
pero no mío.

Bueno te quiero
como pan que no sabe
su masa buena,
pero no mío.

Alto te quiero
como chopo que al cielo
se despereza,
se despereza,
pero no mío.

Blanco te quiero
como flor de azahares
sobre la tierra,
pero no mío.

Pero no mío
ni de Dios ni de nadie
ni tuya siquiera.

No, no, no, no, no,
no mío.
No, no, no, no, no,
no, no, no, no,
ni tuyo.
No, no, no, no, no,
no, no, no, no, no,
no mío.



Libre te quiero es una película documental de 2012 dirigida por Basilio Martín Patino que narra la Acampada de Sol organizada por el Movimiento 15-M en la Puerta del Sol de Madrid desde mayo a octubre del año 2011.

Origen del título Libre te quiero

Libre te quiero es el título de un poema del escritor Agustín García Calvo. A dicho poema le pondrá música el compositor y cantante Amancio Prada en el disco grabado en 1979 Canciones de amor y celda.2 El poema cantado por Amancio Prada está incluido en la banda sonora de la película de Basilio Martín Patino.3 4Wikipedia

**************************************

Susurrando reflexiones…

LIBRE TE QUIERO: para amarte también con la libertad del espíritu que te elige, te admira, te escucha, te disfruta, te ama y se convierte en la esencia que vive porque forma parte de cada uno, simplemente, porque sí, sin explicaciones; la luna no espera que la mimen, simplemente está y los amantes se refugian en ella cuando necesitan contarle de sueños y de amaneceres. Libres como el viento los amantes no necesitan esconderse ni llorar, ni gritar, si siquiera pedir, todo llega sin esperarlo “Nadie sabe porqué” Tal vez porque lo que se plasma en el alma no está sujeto a ninguna valoración, solo existe…AMPARO E.S

LA COPA DE CRISTAL





CUENTO

Autora: Amparo Estévez Saviza

LA COPA DE CRISTAL

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LA COPA DE CRISTAL

A menudo, diría todas mañanas, él se sienta en un sillón (vecino a una vitrina de la casa) a leer el diario… Y le empieza a llamar la atención aquella copa de cristal que brilla más que las otras.
-Esta noche beberé mi vino en esa copa-piensa-y se va a su trabajo.

-No he reparado que es especial y me merezco beber el mejor vino de mi bodega en ella…

A todo esto LA COPA DE CRISTAL sabe que se diferencia de las otras por ser transparente, lúcida y atractiva a simple vista.
Lo que el hombre no sabe es que es él quien la vuelve de cristal cuando la mira.

¿Cuántas veces me he sentido una simple y vulgar copa? -piensa ella- y decide ser importante en cuanto pueda soñar (Porque las copas también sueñan a veces)

La copa permanece allí, olvidada, observando cómo el hombre regresa de su trabajo cansado. Sediento. Aburrido…
Y es cuando se decide por su vino, abre la vitrina y toma una copa.
Y recuerda: hay una que brilla diferente a las otras y la toma a escondidas, porque no siempre se bebe en ella, solo en situaciones especiales. Su mujer no se lo permitiría...

Y allí, en su sillón favorito de vez en cuando saborea su vino y se queda mirando la copa.


Un día la copa brillante y bonita, en un destello mágico, tal vez tocada por el alcohol, le habla:

-Si no me dices tus secretos cuando quieras bajarme del estante no dejaré que me tiñas con el brillo de tu mirada, seré una copa más y ya no sabrás cuál es la que mojó tus labios…

Él sonríe y le responde -¿Quién te crees que eres para saber mis secretos?

Responde: -A veces pienso que soy una copa vulgar, una cosa sin alma, una simple cosa del sustantivo femenino que utilizas para consuelo de tu vida. Simplemente la guardas en la vitrina y a otra cosa. Ya no me tomes como recipiente cuando solitario espera llegar a la casa. Un día ya no estaré...

Cuando él regresa a buscarla sonríe porque ella no ha cumplido con su amenaza. Aún brilla su cristal.

Y como siempre la toma y sirve su vino, repite los tragos y vuelve a buscar más vino.
Luego la vuelve a guardar y hasta el otro día.

A veces pasan meses y sabe que estará ahí esperando sus caricias, su boca, y lo único que se le ocurre es impacientarse cuando descubre sobre su sillón favorito que ella ha dejado una rosa para recordar sus encuentros.

Una noche en que está muy aburrido, la toma, la llena de su vino favorito y le dice que quiere de ella un momento especial…

La toma e intenta decirle palabras bonitas para que brille más que de costumbre. Cada tanto bebe. Ella hace escucha sus palabras y refleja en el líquido un rostro. Es alguien que el reconoce y asustado devuelve la copa al estante de su lujosa vitrina.

En ese acto acaba presuroso el y piensa en voz alta - "ya no debo beber" y la retorna sin planes para el día siguiente.

Y expresa en voz alta como para darse ánimo: -"Eso haré una madrugada, estoy desilusionado porque esta copa no cumple su destino" en su señoríos de cristal, no sabe prolongar los saboreos del mejor vino que ha encontrado.

Cada vez que él toma la copa,(y sigue con su rutina) ésta brilla más y se hace inconfundible entre las otras. Lo peor que ha tomado conciencia que esto pasa cada vez que le da cierta importancia, cada vez que la toma entendiendo que no hay copa como aquella.

Eso le incomoda. Aún le sorprende que la irreverente quiera saber de su vida.
Y piensa ¿Quién es? ella quiere saber. Si ha sufrido y por qué...

Y él no no alcanza a comprender por qué ella está dejando de ser una simple copa de cristal

-¡Pero qué pretende esta cosa! si no es más que una copa. Hace preguntas estúpidas. No le basta que saboree mi delicioso vino, quiere inmiscuirse en mi vida.

Y le cuenta a sus amigos las anécdotas diarias con la copa…

Le preguntan por qué no toma otra y ya... Él se queda pensando…
"Tal vez me está gustando este juego- ¿Qué pierdo? Mientras no desnude mi vida…

Por más que brille no deja de ser una cosa. Una simple copa… se dice a viva voz.

Pero un día cuando la busca, para beber el vino más caro del mundo que ha conseguido, la copa no está allí…

Hace una hora que moviliza detrás de otras copas sencillas, en otros lugares de la casa y no la encuentra. Así durante días. Bebe desde ese instante en una cualquiera, -total, (dice para conformarse) era una copa más. Se desangra de sólo decirlo.

Su vino no es el de antes para su cata habitual y así comprende que la magia vivida la ha inventado su mirada ¡Le había sido tan fácil bajarla de la vitrina y tenerla!

No puede romper la vitrina porque sus buenas costumbres se lo impiden, pero desde ese día busca una copa diferente.
Cree que va a encontrarla tarde o temprano, sin embargo la vida pasa y a la par del transcurrir de los días suceden cosas.
"Cosas que no vemos pero se manifiestan en forma de cristales rotos"

Amparo Estévez Saviza

*********************************************AMPARO ES-18-06-2015

El contenido referido a REFLEXIONES de este blog son publicadas

en un libro personal del mismo tema con Derechos Reservados de Autor/2014

/República Argentina

CÓNDOR,viento y soledad




CÓNDOR,viento y soledad
Publicado el 27 abril, 2016 por amparorules


UNA PRETENCIOSA PALOMA



“QUISO VOLAR TAN ALTO COMO EL CÓNDOR”

Un día cualquiera de los tantos entre los cuales sus sombras se encuentran, ella le dice:

-Puedes enseñarme a volar tan alto?

Y él no contesta…



Otro día en el cual él ha olvidado regresar y aún se encuentran conversando ella le dice, ya casi de noche:

-Si tú no supieras volar tan alto ¿Qué harías?

Y él no contesta…



En una oportunidad ella decide confesarle que está enamorada y le pregunta:

¿Tú sabes cómo te veo?

Y él no contesta…



Pero, su curiosidad puede más y al menos pronuncia:

-Dime

Ella continúa:

-Eres un magnífico ejemplar de tu especie, tienes unas plumas bellas y cuando vuelas…

-Bueno, cuándo vuelas me haces sentir emociones que se van contigo; pero no sé volar como tú para seguirte…



Él la mira y modestamente dice:

-Soy un ave grande pero vulgar…ya es muy tarde debo irme.

Y ella se queda pensativa esperando que al día siguiente vuelva, pero no es así…



Pasan nueve meses

Ella le envía mensajes pero no se los responde. Algo así como que el viento evapora las plumas en donde escribe. Es un falso consuelo pero necesita creer. La lluvia se le hace insoportable y lo pasa mirando el cielo todos los días.



Su admiración y cariño por él no le permiten dejar de luchar y se propone enviar mensajes más crudos con el ánimo de impactarle

Una tarde escribe en una inmensa pluma de águila algo como:

¿Qué haces que no me encuentras? ¿Cuándo? ¿Cómo? Y en medio le dibuja un corazón de paloma, “Azul”, las palomas de los sueños tienen el corazón azul…

Por ese detalle él debe identificarla de inmediato…



Y un día de pleno sol, cuando casi había perdido las esperanzas, el cóndor regresa.

Igual que siempre, con su canto de palabras de pico corvo y dulce mirada…

Ella se olvida de todo, sólo tiene arrumacos de paloma, intenta caricias en su cuello de aro blanco. El pico de gancho de bello cóndor, parece que se la va a comer; pero es un esbozo de amor viajero.



Ya no quiere volver a fracasar con él y se pone a estudiar. Un viejo palomo aburrido que de viejo, ya no vuela casi, se dedica a enseñar. Y es así que lo consulta y éste aconseja y relata:



“Los incas creían que el cóndor era inmortal. Según cuenta el mito, cuando el animal siente que comienza a envejecer y que sus fuerzas se le acaban, se posa en el pico más alto y saliente de las montañas, repliega las alas, recoge las patas y se deja caer a pique contra el fondo de las quebradas, donde termina su reinado. Esta muerte es simbólica, ya que con este acto el cóndor vuelve al nido, a las montañas, desde donde renace hacia un nuevo ciclo, una nueva vida. El cóndor simbolizaba la fuerza, la inteligencia y el enaltecimiento o exaltación. Era un animal respetado por todos aquellos que vivían en los Andes desde tiempos anteriores al descubrimiento de América, ya que no sólo traía buenos y malos presagios, sino que también era el responsable de que el sol saliera cada mañana, pues con su energía era capaz de tomar el astro y elevarlo sobre las montañas iniciando el ciclo vital.
Una ancha banda blanca resalta en el dorso de las alas y un nítido collar blanco no completamente cerrado al frente, protege la desnuda piel del cuello”

Luego de escuchar atentamente lo increpa:

-Pero, tú no conoces a mi amigo!!!

-Viejo Palomo…¡Eso lo sé!

–No puedo creer lo que me dices…¿Qué se tira de la montaña cuando envejece ? ¡¡¡Dios mío, le deseo que renazca luego, como dices!!!

– ¡Dime algo nuevo! replica impaciente… ¿Se enamoraría de mí?

No le gusta nada la expresión del viejo Palomo. No quiere averiguar y

sigue…

Los días continúan…

Se ven seguido. Se esperan. Se sienten cercanos.

Ella le habla con ternura pero él se aleja de a poquito…



¡Cómo va a decirle a sus semejantes que todas las tardes se aleja a encontrarse con la paloma!



El consejero de los cóndores le protesta: ¡Es una locura! ¿Has perdido el juicio?



Ambos desean desobedecer a la marea, a los vientos, las tormentas y las ganas de

volar juntos…y logran de algún modo embarcarse en la nave espacial de los sinsentidos y desaparecer por algunos días.



Pero llega casi sin avisar la Cruela de La Rutina. Aquellas cosas en las cuales no coinciden se ponen fieras y estorban.



A veces pueden tener alas ambos, pero al volar habrá uno que quiera estacionarse en alguna parte y el otro no querrá.



Las aves jamás dejan su libertad, ni aún deseando aparearse. Su instinto les dice que aquello que las sujete, tarde o temprano les imposibilita volar y más aún, saben que en algún momento aunque se distancien, pueden posarse en la misma piedra, pasar por el mismo lugar y tal vez reconocerse.



“Siempre habrá un cóndor que se enamore de una paloma y siempre habrá una paloma

domesticada que quiera cambiar al mundo, porque se lo enseñaron los humanos al hacer que coman de sus manos y edificarles bonitos palomares”



La paloma siembra ternura, busca posarse sobre la tierra y empollar en sus nidos. Se sabe dueña de la paz y cree en los niños de las plazas que las espantan jugando, en la vida que espía por las ventanas de los edificios y en ella misma que nunca dejará de ser lo que es a pesar del cóndor.

El cóndor se sabe majestuoso, lo suficiente como para olvidar a la paloma y justificar su libre albedrío en medio del viento y la soledad…

Amparo Estévez Saviza

AMPARO.ES

28-04-2016

Derechos Reservados de Autor

UN CUENTO DE PRIMAVERA - HABÍA UNA VEZ UN CISNE..





HABÍA UNA VEZ UN CISNE
Publicado el 21 septiembre, 2016 por amparorules



HABÍA UNA VEZ UN CISNE...

UN CUENTO DE PRIMAVERA
(De primavera)

HABÍA UNA VEZ UN CISNE...
UN CUENTO DE PRIMAVERA
(De primavera)
Amparo Estévez Zawisza

Para Artistas-Poetas y Enamorados

Las estaciones van cambiando y la vida pasa.
Un Cisne amanece junto a los patos y cree que todo va normal, (al igual que
en el cuento) se descubre un "patito feo, pero siente un impulso...
Y observamos con mirada tierna a ese pato, diferente a todos, y él sigue por la vida al lado de los patos, pero no nos
damos cuenta que al lado del patito feo, somos otro patito feo si no reaccionamos.
No por naturaleza sino por elección. Una elección que no tiene lógica y todos los patos normales critican. Al cabo de un tiempo el (hasta entonces) patito feo, emerge ante los espejos y se descubre CISNE.
Sin estaciones del tiempo; nos vamos convirtiendo en Cisnes junto a él. Algo habita que nos cambia y si no amamos lo que hacemos, entendemos que no somos reales...
Somos Cisnes y no lo sabemos...
En el amor ahora son dos y lo único que saben: ambos no quieren perderse de vista uno al otro. Solo eso y los patos protestan a viva voz y no ven la transformación...
"Cuando ambos se reconocen Cisnes; se ven, se entienden y caminan entre los patos…Uno mira al otro y le dice:
Los patos no te verán, creerán que caminas a lo pato, pero eres un Cisne"
No te vayas, no te apartes de los otros Cisnes. Nunca te alejes porque morirás un poco y corres el riesgo de nunca volver; o bien morir de a poco al imaginarte pato de nuevo. No condenes al Cisne que creció contigo a volver a ser pato. No te vayas por la laguna para nunca volver porque morirás un poco cada día...
¡Que en un día como hoy NO haya muchos Cisnes en potencia que pierdan su camino!
Dicen que en primavera los iguales se juntan y lo hacen para siempre. Allí puede estar tu Cisne esperando por ti y no lo sabes.
Una vez que te conviertes en Cisne puede que no lo aceptes y decidas vivir como pato, pero no hay nada más triste que un Cisne venido a menos…
Nunca rechaces tu realidad. ¡Piénsate más! Puede que nunca encuentres tu Cisne gemelo,o aquello que te llama a pintar, a escribir, a crear o amar... pero si te pasa nunca lo abandones, porque la vida pasa rápido y "Al irse siempre se muere un poco"
Amparo Estévez Saviza – Derechos Reservados de Autor/21/09/2016

ME LO DISTE A PROBAR...







ME LO DISTE A PROBAR…
Publicado el 29 septiembre, 2016 por amparorules








La mujer de ojos color café mira sin ver. Sus pasos transitan un laberinto lleno de imponderables. Hasta hace unos días ha volado en vez de caminar. Es casi una repetición sin sentido para ella, pero no lo es para la vida.



Extender sus brazos y tocar el cielo significa saborear la dulce fruta que cae del árbol de sus desvelos. Su boca contiene el jugo para saborearlo mejor e imaginar el maná de las delicias de los frutos del paraíso, antes de ser seres expulsados.



Y se convierte en fauces su boca, con el correr de los minutos. Un animal irreconocible la devora y sus ojos emanan el jugo ácido de la despedida. Nadie puede convertirse en nube y luego regresar a la tierra caminando. Solo puede hacerse a través de la lluvia.



Las flores que han perdido sus pétalos la observan con pena. Están al igual que ella, en el triste instante en que caen sus láminas enroscadas en el pistilo, para dar lugar al tiempo que todo lo devora. Hace que las moléculas se acomoden y en un abrir y cerrar de ojos las pierde en medio de una ventisca.



¡Apriete el mundo su vanagloria! hágala cantar cuando aún es tiempo, porque luego el oscuro invierno todo lo helará.



¡Para qué miras al cielo tonta mujer! pidiendo que los campos reverdezcan y la que fue tu flor renazca y se pinte de colores, si ya no es posible.



¿Sabes porqué canta el zorzal cuando aún el sol está oculto?

Porque su sabiduría señala la aurora, esa que hace a los hombres recuperar su verga y a las mujeres engendrar a los hijos…

Un sin número de roces bajo las diáfanas madrugadas impulsan la vida y la mujer se entrega cual orilla encendida por los murmullos del río que corre ligero para cumplir con su destino de correntada apasionada por llegar a buen puerto.



No hay barcas repletas de testigos ni lobos como en el mar que impidan al río seguir con sus aguas a veces turbias, a veces malolientes, a veces crispadas, a veces cubiertas de peces que tapan su lecho pero lo instan a navegar en su carrera desenfrenada…



Una vez llegan las cuatro estaciones. Ella, la mujer de los ojos color café, no es testigo del final si no lo desea.

La impronta, los sentimientos, las decepciones, se pueden convertir en magia. Ella ya no mira en derredor. Los poros de su rostro se han abierto para disimular la mueca y han hecho aflorar una sonrisa.

Del rictus ha logrado que sus dientes semejen hojas de margaritas y su voz se hace oír solo con palabras bonitas cargadas de ternura.

La yema de sus dedos sienten en el contacto solo piel de bebé.



Y llega con su fruta deliciosa anhelada y sus sueños dormidos a convertirse en hada. Hada que tiene una sola varita mágica, su belleza.

Una vez que cruzó el río le queda una sola oportunidad: que el maquillaje le perdone las arrugas, y cuando todos la miren vean en ella a una verdadera hada y no la bruja que sin escoba no podría volar.



¡Me lo diste a probar vida ingrata, para luego quitarlo y dejar solo el sabor agrio del limón caído al pie del árbol, que deja a sus frutos evolucionar, libres y lejos. No hay rama que pueda regresar el fruto a su seno.

La única continuidad de la vida del árbol está en sus frutos, pero no le es necesario pregonarlo…Quienes se acercan admiran el fruto, su tamaño y color. Nadie mira al árbol al menos que tenga alguna peste…

Desde ese día todo se ha invadido y transformado; nada queda de la mujer que tiene todo para dar.



Los gorriones tan libres como su breve vida lo indican, acompañan las mañanas taciturnas. Las tardes ajetreadas los tienen entretenidos. Y las noches…



No es fácil describir las noches: la luna sonríe de insensateces, las estrellas borran sus mensajes de ubicación, la oscuridad se vuelve amiga y la brisa es el oxígeno que le dice al aliento : Ven caricia imaginaria, te necesito pero no te espero…

AMPARO ESTÉVEZ SAVIZA – Derechos Reservados de Autor – 30/09/2016

Yo no lo sabía…






Yo no lo sabía…

NO SABÍA

Qué me depararía la vida



Ni que iba a hacer yo con eso

cuando presta llegaría



Y me hablarían los silencios

de nunca, de siempre, y no lo vería…



Ni que podría soportarlo

Y más acá, hoy, no lloraría…



Y perdonarlo todo

corazón que se humilla



Sangrando para no ver

la copa caer en astillas



Y me faltaría el beso

de aquel a quién yo quería



Ni que éste se perdería

por la huella incomprendida



En reverdeces de la gema

mis destellos se ahogarían



En todo lo imponderable

que marcarían mis días



En nada de relevancia

según se vería…¡Soñaría!



Al vacío mi esperanza

y sonreír la hiena herida



Barajar los sueños

cuando aparecían



Y estar alerta…ya ni sé de qué

porque no se cumplirían



Porque es bueno casi todo

lo que ha pasado en mi vida



Parece una realidad

pero es magia escondida



Puse afán en la terneza

y sé darla todavía



Lo bueno que fue real

según ayer parecía



Tomar la mano muy tibia

de quien mujer me haría



En la piel de lo que nace

mi vida equilibraría



Con sus llantos de llegada

cinco almas me nacerían



Y supe…la entraña multiplica

si la mujer se brinda



Por como y tanto lo fuera

caminaría agradecida



Los últimos años

bendecirían mis días

Paz y bellos racimos

Y algunas maravillas…



Reflexión…



Solo faltaría dejar huella

y soñar todavía

Pues se comprendería

es sano entregar la mirra,

y tejer el manto bueno…

con la tela de la vida…





¡¡¡Camina, ya camina!!!

No esperes nada, olvida

lo que quedaría pendiente

si no acabas la poesía…



“Clavarías puntadas al pañuelo

bordando las iniciales

y prepararías la despedida

cuando el supremo te llame”

Amparo Estévez Saviza/14/10/2016

Derechos Reservados de Autor

¡Ah! lo que no veo y me ve






¡Ah! lo que no veo y me ve
todo a flor de piel ¿qué tú ves?
¿Unas almas resignadas?

¿Agujereado el corazón?
Dos alas a mis espaldas
desplumadas aves son

No lo... ¡mi luna ve!

¿Y perdimos el corazón?
escondidos, a mi pesar
¿sin saber cómo y cuándo?

No lo...¡ mi luna ve!

y tú luna ¿no me ves?
No veo lo que ella ve…
añoranzas de un café

Una capa en la ventana
junto a un libro estaba él
Y una lágrima ácida...

¡ya!... que debo esconder
La luna llena ¿no ve?
a un bello sueño responder?

Noches largas ¿no ve?
cielos negros ¿no ve?
rayo de grueso trazo...

Luna llena ven ¡alumbra!
de tanto en tanto ¿qué miras?…
¡Y así lo tomo sin prisa!

¡Disimula, estoy triste !
pesares de alma en trizas…
que cambia honor por sonrisas

-Dame un toro bien fiero
Y haz que golpee en la arena...
¡Buen gavilán de las noches!

De amores apasionados
vive y muere un toro también
su corazón no resiste...

No me ve, vale y...

¡sangra el estoque!
¿No lo ves? ¡ese toro!
¿no lo ves?...
ese toro sangra la lona
ese toro busca el rojo
nuere impaciente en arrojos
bufando así sus despojos...









Amparo Estévez Saviza

Derechos Reservados de Autor/ 15/10/2016

Mujer, nunca te enamores de un matemático...





Ah, la mujer y sus planteamientos cercanos.

Mujer, nunca te enamores de un matemático. Hazlo de un historiador, de un poeta, de un escritor o de un médico, pero nunca de un hombre dedicado con pasión a la matemática.

Un matemático tiene corazón matemático…no da un paso sin analizarlo y constantemente está buscando el dato. Ese dato que se convertirá en una definición. En el enunciado de un teorema, en la resolución de algunas cuestiones matemáticas que lleguen a una conclusión. Y esa conclusión A VECES NO LES ALCANZA.

Su vida es una sucesión de paradigmas que los tienen quietos solo por un tiempo y luego descubren otra verdad que aniquila la anterior…

Sus vidas son un continuo accionar en medio de la incertidumbre…

El matemático es aquel que te dice “cada minuto vale” no hay pasado ni futuro…

O tú le dices: Te amo apasionadamente y él va a buscar en el diccionario qué alcance tiene el término “apasionadamente”

Tú le dices, vivo cerca…Pues él irá a buscar tu casa con el GPS.

Si tú le pides que veraneen juntos, tú elegirás el lugar más romántico. Pero él te tratará de convencer de las virtudes de algún lugar ya experimentado, que resolvería tal o cual tema y de inmediato irá a buscar folletos de sitios ya vistos, recomendados etc

Si cuando llegas al hotel le dices que quieres un cuarto con vista al lago, te dirá de todos los inconvenientes que traería, porque ya lo tienen todo perfectamente estudiado…

Si has elegido un libro de novela romántica, te dirá que conoce un autor amigo suyo que escribe magníficas novelas de viaje, de experiencias en el mar, de logros y aventuras-

En cuanto a elegir un sombrero bonito, que te ha gustado mucho, él te dirá que estuvo observando y a dos cuadras de ahí los vio más baratos…y comenzará a hablarte de la injusticia en la que viven ciertos artesanos que fabrican sombreros para sus patrones y les pagan una miseria.

Tus pies estarán muy cansados y ya quieres regresar al hotel. No han llevado su coche, por lo tanto deben tomar un taxi. Grande será tu sorpresa cuando te diga que la tarifa está más accesible a tres cuadras de ahí, a estos sinvergüenzas no les vamos a regalar nuestro dinero.

Cuando tú le dices que ya es tiempo de tener un hijo, puede que de inmediato te conecte con algún lugar de Internet que tiene la estadística de cuanto sale hoy criar a un bebé…

Le harás muchos mimos para que acceda y él te dirá: los sueños son muy bonitos pero hay que ser realistas, hay que pensarlo muy bien…Tú le dirás que ya llevan cinco años de casados…y él te dirá: -espera, cuanto nos falta para terminar tal o cual crédito. Qué hacemos con la pileta, todavía nos falta un montón…Y claro, cuando viene todo meloso,

ya sabes lo que quiere, eso es en lo único que no te pone trabas complejas.

Entonces qué haces, es el momento exacto para pedirle algo de aquello que te niega. Y hablas y hablas y eso no le gusta.

Un día subí a un taxi y el chofer comenzó a hablar de política y en medio de la conversación me dijo algo que no podía creer. Dijo- lo que pasa que ahora mi mujer se avivó. Antes no me pedía ropa buena, perfumes, nada…

Entrar en el cerebro de un hombre es imposible para nosotras, pero para ellos debe ser lo mismo. Lo que falta es situarse de vez en cuando en la piel del otro.

El matemático resuelve sus ecuaciones, en el trabajo y en su vida diaria. Me hubiese gustado conocer a TALES DE MILETO…

El primer sabio de la historia. De él se ha escrito lo siguiente:

…cuando Tales regresó a Mileto vivió en gran soledad y solo pensó en contemplar las cosas celestes. El amor de la sabiduría le alejó de los cuidados del matrimonio, haciéndole preferir la tranquilidad del celibato. A la edad de veinte y tres años, su madre Cleobulina le instó para que aceptase un partido ventajoso que se presentaba, «La juventud, respondió Tales, no es tiempo de casarse. En la vejez, ya es demasiado tarde, y el hombre que está entre las dos edades, no tiene tiempo de escoger mujer». Algunos dicen que en los últimos años de su vida se casó con una egipcia, autora de muchos buenos escritos.

Un día en que unos pescadores de la isla de Co habían echado la red al agua, pasaron por allí ciertos habitantes de Mileto y les compraron todo lo que la red contuviese antes de sacarla. Admitida la proposición, sacaron la red y en ella venía una trípode de oro macizo, arrojada al mar, según la opinión común, y en aquel mismo sitio, por Helena cuando volvía del sitio de Troya, en cumplimiento de cierto oráculo de que se había acordado. De resultas de este acaecimiento se suscitó una disputa entre los extranjeros y los pescadores sobre a quien correspondía la trípode. Los pueblos respectivos tomaron parte en la contienda, abogando cada cual por sus compatriotas. La guerra iba a estallar entre los diferentes partidos, cuando se pusieron de acuerdo en someter la cuestión al oráculo de Delfos. Este respondió que se diese la trípode al primero de los sabios. Tales fue el primero a quien se presentó la trípode; la remitió a Bías, y Bías por modestia la envió a otro. De este pasó de mano en mano a Solón el cual dijo que «nadie era más sabio que un Dios». La trípode fue llevada a Delfos y consagrada a Apolo. Algunos jóvenes de Mileto reconvenían un día a Tales acerca de la inutilidad de su ciencia, puesto que no le servia para salir de la indigencia en que se hallaba. Tales quiso darles a entender que si los sabios no acumulan riquezas es solo por el desprecio con que las miran, siéndoles muy fácil adquirir los bienes de que no hacen caso. Con este objeto y habiendo previsto, según dicen, por sus observaciones astronómicas que aquel año seria sumamente fecundo, compró todo el fruto de los olivos de los alrededores de Mileto antes de la cosecha. Esta fue abundantísima y muy considerable por consiguiente la ganancia del filósofo; más éste convocó a todos los mercaderes y comerciantes de Mileto y les distribuyó sus provechos.

Tales daba gracias a los dioses por tres cosas: por haber nacido racional y no bestia; hombre y no mujer; griego y no bárbaro.

Creía que el mundo había sido arreglado del modo que lo vemos por una inteligencia que no había tenido principio y que no tendría fin.

Tales fue el primer griego que enseño la inmortalidad del alma.

Un día fue un hombre a preguntarle si nos era posible ocultar nuestras acciones a los dioses. «Ni aun nuestros más secretos pensamientos, le respondió, les son desconocidos.»

Decía que lo mayor que hay en el mundo es el espacio porque en él se encierran todos los seres; que no hay nada más fuerte que la necesidad pues lo vence todo; ni nada más pronto que el entendimiento del hombre pues en un momento recorre todo el mundo; ni nada más sabio que el tiempo pues lo descubre todo; ni nada en fin más suave y agradable al hombre que poder hacer su voluntad. Decía que el mucho hablar no es señal de gran entendimiento; que un hombre de bien debe acordarse de sus amigos ausentes o presentes; que es menester ayudar a nuestros padres para que nuestros hijos nos ayuden; que no hay cosa tan terrible como ver envejecer a un tirano; que lo que puede darnos un gran consuelo en la desgracia es saber que el que nos atormenta es también desgraciado; que no debemos hacer lo que reprendemos a los otros; que la verdadera felicidad consiste en la salud perfecta, en los bienes moderados y en no pasar la vida en la molicie y en la ignorancia; que la obra más difícil del hombre es el conocimiento propio, y por esto inventó aquella hermosa máxima que después fue grabada en una lámina de oro y consagrada a Apolo en su templo: CONÓCETE A TI MISMO.

Decía que la vida y la muerte no se diferenciaban, y cuando le preguntaban porque no se dejaba morir respondía: «Porque siendo lo mismo vivir que morir, no hay motivo para decidirme en favor de la una más bien que de la otra.» Dedicaba algunos ratos a la poesía y hay quien asegura que él fue el inventor de la medida de los versos hexámetros. Un hombre acusado justamente de adulterio le preguntó si le seria lícito justificarse por medio del juramento. «Por ventura, le respondió, ¿es el perjurio un crimen menor que el adulterio?»

Mandretes de Priene, que había sido su discípulo, le fue a ver a Mileto y le dijo: «¿Que recompensa quieres que te dé, Tales, para manifestarte cuánto te agradezco los hermosos preceptos que me has enseñado?» «Cuando enseñes a los otros, respondió Tales, diles que yo soy el autor de aquella doctrina, lo cual será en ti una loable modestia y para mí un precioso galardón.»

Tales fue el primer griego que se aplicó a la Física y a la Astronomía. Creía que el agua era el primer principio de todas las cosas; que la tierra era agua condensada y el aire agua enrarecida; que todas las cosas se mudaban continuamente unas en otras, pero que al fin todo se convirtió en agua; que la tierra estaba en el centro del mundo; que se movía alrededor de su propio centro, el cual era el mismo que el del universo; que éste está lleno de seres invisibles, los cuales se mueven continuamente en varias direcciones Y que las aguas inferiores del mar tienen cierto sacudimiento que es la causa de su agitación.

Los efectos maravillosos del imán y del ámbar y la simpatía que existe entre varias cosas de la misma naturaleza, le hicieron creer que no hay nada en el mundo que no esté animado.

Creía que la causa de la inundación del Nilo eran los vientos Etesios que soplan del Norte al Sur, retardan las aguas del río que van de Sur a Norte y las obligan a derramarse e inundar los campos vecinos.

Tales fue el primero que predijo los eclipses del sol y de la luna y que hizo observaciones sobre los diferentes movimientos de estos dos astros. Creía que el sol era por sí mismo luminoso y que su volumen era ciento y veinte veces mayor que el de la luna; que ésta era un cuerpo opaco capaz de reflejar la luz del sol, en una sola mitad de su superficie, y con esta doctrina explicaba los diferentes aspectos que aquel astro nos presenta.

Él fue el primero que investigó el origen de los vientos; la materia de que se compone el rayo y la causa de los relámpagos y de los truenos.

Nadie había descubierto antes que él la manera de medir la altura de las torres y pirámides por su sombra meridional, cuando el sol está en el equinoccio.

Fijó el número de los días del año en 365; arregló el orden de las estaciones y limitó cada mes a treinta días; al fin de cada doce meses añadía cinco días para completar el curso del año, según el método que había aprendido entre los egipcios.

Él fue quien descubrió la constelación de la osa pequeña de que se servían los fenicios para arreglar su navegación.

Un día, saliendo de su casa para ir a descubrir los astros, cayó en una zanja; una criada vieja que tenía acudió corriendo a su ayuda y después de haberle ayudado a levantarse le dijo burlándose de el: «¿Crees poder descubrir lo que pasa en el cielo y no sabes lo que tienes a los pies?»

Tales gozó de mucha consideración durante su vida; sus contemporáneos le consultaban en los negocios más graves. Creso, después de haber emprendido la guerra contra los persas, se adelantó a la cabeza de un fuerte ejército hasta cerca de las orillas del río Halis. No sabía como pasarlo porque no era vadeable y él no traía ni puentes ni barcos. Tales, que se hallaba a la sazón en el campamento, ofreció darle un medio seguro de pasar el río. Para esto hizo cavar un gran foso en forma de media luna que empezaba en una de las extremidades del campamento y terminaba en otra, con lo cual el río se dividió en dos brazos con poca agua, de modo que el ejército pudo vadearlo y pasar sin dificultad. Tales en aquella ocasión no quiso que los habitantes de Mileto hiciesen alianza con Creso, el cual la deseaba vivamente. Esta prudente cautela salvó a su patria, porque Ciro venció a los Lidios y saqueó todos los pueblos que habían entrado en confederación con ellos, pero respetó a Mileto que no había tomado partido contra él.

Siendo Tales muy viejo quiso que le llevasen a un terrado para ver desde allí los juegos del Anfiteatro. El calor excesivo que hacía le causó una irritación tan violenta, que murió allí mismo de repente. Era la 58 Olimpiada y el año 92 de su edad. Los habitantes de Mileto le lucieron un magnífico funeral. http://www.e-torredebabel.com/Biblioteca/Fenelon/vida-tales-fenelon.htm



REFLEXIONA

(Según mi leal saber y entender)

Si amas a un matemático deberás armarte de gran paciencia.

Él te dirá aquello de Machado: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”

Mucho de cierto hay en estas palabras, pero si las tomas al pie de la letra:

No pondrás esperanza en encontrar el camino, sólo andarás

No intentarás ser el caminante porque tu camino tiene plazo, es hoy, mañana quién sabe… sin la esperanza de un mañana, sin proyectos e ilusiones…

No te conformarás con la huella y al avanzar querrás ver todo tal cual lo miras y ves. Sin cambios, como que todo está fijado de antemano.

No le darás oportunidad a que aparezca un ángel que lo cambie todo.

No te sentirás feliz de antemano, vislumbrando los resultados, aunque después no se cumplan…

Dejarás de jugar por miedo a que el tiempo que consideras perdido te pase factura.

Tendrás miedo por cada minuto en que la vida te sorprenda…y el camino ¿Algún día lo verás? No, serán estelas en la mar

Sabrás al fin que el camino lo transitas pero no lo dibujas tú.



Mujer, busca a alguien que te permita soñar. En tus caricias está el secreto de la ternura a la que ningún hombre se resiste. Ellos necesitan del amor y la ternura de una mujer. Necesitan un motivo para ceder sin claudicar, hazle sentir que es amado y respetado.

Son diferentes a nosotras; en el ir y venir de la vida cada paso que un hombre da es pensando que está haciendo algo importante y nunca lo minimices.

No lo desafíes. Tú sabes lo que vales. No lo enfrentes. Busca tu verdad y lo hablas. Si eso no es posible se trata de que estas en el lugar equivocado. No quieras cambiarlo todo. El tiempo tiene razones para posponer, evitar y anular algunas acciones o hechos.

Ama al matemático pero tómalo con buen humor. Tal vez él también sufre por tus planteos a los que no puede conformar.

La vida es precisamente maravillosa por estas diferencias…Si hay Amor todo se habrá salvado… Amparo Estévez Saviza

Derechos Reservados de Autor/16/10/2016